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La prensa y el Congreso, en la mirada de Andrés Calderón

Publicado: 2023-05-31

El año pasado, el 2022, Andrés Calderón publicó “Polítika vs. Prensa; una relación tóxica en tiempos convulsivos” (Penguin Random House, Grupo Editorial, serie “Debates”).

El uso de la letra “k” en el título del texto advierte por anticipado que el periodo por el que transita el texto corresponde a la crisis que estalló el 2016, cuando el Congreso quedó poblado por una mayoría absoluta de congresistas fujimoristas que solo se dividieron a partir de la disidencia de Kenji Fujimori con la primera vacancia del entonces presidente Kuczynski. En el prefacio Andres confirma que el Congreso de 2016 fue el “más agresivo que había enfrentado la prensa peruana en democracia” (páginas 15). Andrés se pregunta qué pasó tal que las relaciones entre el fujimorismo y los medios se volvieron así de intensas, especialmente después de las elecciones de 2011, cuando se atribuyó a cierto sector de la prensa haber dado más espacio a Keiko Fujimori que a Ollanta Humala.

Andrés ubicó el origen de esa historia en una cadena de incidentes que comienza con un reportaje en particular propalado en el marco de la segunda vuelta por un programa político en especial, Cuarto Poder.

El reportaje trataba sobre el caso Ramírez y la investigación que sobre él seguía la DEA. El reportaje incluía una declaración de un testigo que sostenía que Ramírez había revelado alguna vez, de palabra, haber recibido una importante cantidad de dinero de Keiko Fujimori para ser lavada. Andrés, que por entonces era jefe de la página de opinión de uno de los principales diarios del país, sostiene que más allá del impacto real de este reportaje la señora Fujimori y su entorno quedaron convencidos que el contenido había sido demoledor y procedieron en consecuencia. La historia de la forma en que se intentó controlar los daños atribuidos al reportaje incluyen una escena bastante torpe en que un programa difundido en un espacio contratado lanzó al aire una grabación alterada en la que el testigo del reporte de Cuarto Poder aparecía desdiciéndose; reconociendo haber mentido. El embuste fue descubierto y, anota Andrés, el resultado fue peor que el reportaje original. Andrés cree que la fractura de la relación entre el fujimorismo de entonces y los medios se produjo a consecuencia de la reacción en cadena que produjo el incidente del audio manipulado que se difundió intentando controlar los daños del reportaje. Nota que la reacción recordó los modos del fujimorismo de los años ´90. Andrés cree que a pesar de lo grosera que fue la manipulación de esa grabación Keiko Fujimori y su entorno siguieron culpando al reportaje original de Cuatro Poder de la debacle electoral que entregó el triunfo en las elecciones, por apretado margen, a Kuczynski, el rival de Fujimori. La teoría aparece ilustrada en el sub título del primer apartado del libro “para Keiko, la prensa le robó las elecciones”. La prensa, precisa Andrés, en alianza con dos grupos económicos vinculados, Graña y Montero y El Comercio y Pedro Pablo Kuczynski, a quien Keiko Fujimori no perdonó lo que parece haberse representado como un complot en su contra.

El desenlace dio origen a una cadena de sucesos dramáticos “Nunca hubo reconciliación entre PPK y Fujimori […] PPK perdió la presidencia de la República en un año y ocho meses. En Fuerza Popular se replegaron recién a los dos años y tres meses, cuando su lidérela fue enviada judicialmente a prisión preventiva por el caso Lavajato. Y el Congreso fue disuelto a los tres años y dos meses de funcionamiento” (página 46).

En cualquier caso, en el periodo que se desarrolló entre 2016 y el 2019 se desarrolla una historia de desencuentros que atraviesan e proyecto de la ley de propiedad sobre los medios, el proyecto de ley del canillita, la introducción en el lenguaje de comunicación política de la construcción “prensa mermelada”, los incidentes por la difusión de imágenes de chats internos del fujimorismo y la reacción, un proyecto de ley contra la difusión de chats, el origen de los trolls, la ley contra la publicidad estatal, que llegó al Tribunal Constitucional (la llamada “ley Mulder”) y los debates contra las filtraciones asociadas a los casos Lava Jato y Lava Juez. Andrés recorre el corto periodo del Congreso intermedio, 2020-2021 y cierra el texto revisando la forma en que se modificaron las correlaciones, y los roles con ocasión a la campaña electoral del 2021. La paradoja queda representada notando que los mismos medios en que se incubó la distancia original del fujimorismo y la prensa, Cuarto Poder y El Comercio pasan en las elecciones de 2021 a modificar sus estructuras internas para acabar intentando impulsar la candidatura de Keiko Fujimori. Andrés nota que Pedro Castillo, a la postre presidente electo, no representaba ninguna garantía para el ejercicio de las libertades de prensa y expresión. Al contrario. Pero no deja de notar que en el angustiante cuadro de elección que representó el proceso las auto correcciones de los medios que ocupan el centro de su análisis terminaron apostando por quien dirigió esa arremetida contra los medios que documenta en el texto.

Las historias políticas son el resultado de procesos acumulativos en los que el desgaste de los modelos y regímenes tiene un papel decisivo. Pero son también resultado de decisiones personales que se producen en determinadas circunstancias y crean personajes e historias biográficas. Andres describe el proceso sobre la base de lo que se ha publicado en los medios y sobre la base de testimonios, algunos anónimos, que le permiten reconstruir procesos particulares, como las disputas entre personajes liberales y fujimoristas al interior del propio diario El Comercio o personajes identificados con nombre y apellido en la dirección de los programas políticos de América Televisión. Por cierto el texto está poblado de testimonios que permiten a Andrés reconstruir la forma en que se desplegaron los debates políticos que rodean esta compleja mecánica de proyectos de ley que en la mayoría de los casos no fueron aprobados nunca, pero sirvieron para organizar disputas que perfilaron la influencia relativa de cada actos en el proceso.

En una sociedad con un tejido institucional poco resistente los medios forman polos de influencia relativa que pueden desbordarse por encontrar pocos obstáculos que contengan a los personajes que se mueven en ellos. La visibilidad crea una imagen de poder, una representación que puede causar estragos si no es ponderada con cuidado. Andrés cuenta una historia que coloca a determinados medios dentro de procesos políticas, como un actor más con vocación de incidencia, no de documentación, registro e información, sino de incidente propia. El libro deja en claro que ese no es el rol que Andrés encuentra que les corresponde. Pero documenta además los estragos institucionales que se pueden generar con desbordes como los que su texto documenta.

Es una aproximación distinta. Una que tiene mucho de testimonial. Andrés estuvo ahí durante todo el proceso. El libro deja en claro que él ha sito testigo u observador directo de las historias que cuenta. Y eso le da al enfoque el valor de una historia que además de pública, es también personal.


Escrito por

César Azabache

Conduce "Conversaciones desde la coyuntura" y "En Coyuntura".Tiene una columna de opinión en La República y publica en espacios digitales.


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